Edad Antigua

La Edad Antigua comienza con la aparición de los primeros escritos (3.000 a.C.) y finaliza con la caída del Imperio Romano (476 d.C.). Primeras civilizaciones.

La Edad Antigua en España está marcada por la colonización  por parte de varios pueblos procedentes del Mediterráneo y por sus contactos con los pueblos que vivían en nuestro territorio. Los más importantes fueron los romanos, que se establecieron en la península Ibérica y en las islas Baleares en el siglo II a.C.
Pero antes de la llegada de los romanos, en la península se encontraban los siguientes pueblos, denominados pueblos perromanos (que descendían de los primeros pobladores de la Península):

Iberos
  • Habitaban en el sur y el este de la Península.
  • Se organizaban en tribus gobernadas por un rey.
  • Vivían en poblados elevados y amurallados.
  • La mayoría eran agricultores, ganaderos y artesanos.
  • Comeciaban con los fenicios y los griegos, y utilizaban su propia moneda.

Celtas
  • Habitaban en la Meseta y en la costa atlántica de la Península.
  • Se organizaban en tribus.
  • La mayoría se dedicaba a la ganadería.
  • Eran expertos orfebres.

Tartessos
  • Reino que existió en el valle del Guadalquivir.
  • Eran expertos orfebres, pues si territorio era rico en metales como el oro, la plata y el cobre.
  • Comerciaron con los fenicios y los griegos.

Distintos pueblos procedentes de varios lugares del Mediterráneo, llegaron a la Península y a las islas Baleares, atraídos por las riquezas minerales (cobre, estaño, plata). A estos pueblos se les denominó pueblos colonizadores:

Fenicios

  • Procedían de Asia.
  • Fundaron colonias en la costa andaluza como Gadir.

Griegos

  • Procedían de Grecia.
  • Fundaron colonias en la costa mediterránea como Emporion.      

Cartaginenses

  • Procedían del norte de África.
  • Fundaron colonias en las Islas Baleares y en el este de la Península como Cartago Nova.
  • Lucharon contra los romanos por el control de la Península, aunque fueron derrotados.

Finalmente, los romanos llegaron en el año 218 a.C. para iniciar la conquista de la Penísula Ibérica, a la que llamaron Hispania. Su ocupación necesitó de tres fases: primero conquistaron el sur y la costa mediterránea,; después penetraron en la Meseta y, por último, dominaron el norte peninsular. Los pueblos que habitaban el territorio ocupado siguieron un proceso de romanización, es decir, progresivamente fueron asimilando su lengua, costumbres y creencias.
Los romanos impusieron en todo el territorio su organización, leyes y forma de gobierno. Construyeron muchos edificios y obras públicas que aún se conservan: acueductos, para llevar el agua a las poblaciones; anfiteatros, teatros y circos, para su espectáculos; y templos, murallas y arcos de triunfo para conmemorar su victorias.


EN CANTABRIA...

Corocotta


Corocotta fue un personaje de la Antigüedad (siglo I a. C.), cuya existencia se conoce únicamente por una sola cita, del historiador romano Dión Casio que, según la traducción más difundida, la de Adolf Schulten, reza así:

Irritóse tanto [Augusto] al principio contra un tal Corocotta, bandolero español muy poderoso, que hizo pregonar una recompensa de doscientos mil sestercios a quien lo apresase; pero más tarde, como se le presentase espontáneamente, no solo no le hizo ningún daño, sino que encima le regaló aquella suma.

Dión Casio 56, 43, 3 (traducción de A. Schulten en Fontes Hispaniae Antiquae, vol. V, Barcelona, 1940, p. 335)